Lunes, 28ª Semana, Tiempo Ordinario, Ciclo II

Publicado: October 10, 2016

Obispo Anthony B. Taylor predicó la siguiente homilía para seminaristas en el Seminario de San Meinrad en Indiana el lunes, 10 de octubre, 2016.


Obispo Taylor

¿Cuál es la señal de Jonás? En el Evangelio de Mateo la señal de Jonás se refiere principalmente a la muerte y resurrección de Jesús, algo que falta en el Evangelio de Lucas hoy. Mateo dice: "Porque así como Jonás estuvo tres días y tres noches en el vientre del pez, así estará el Hijo del hombre en el seno de la tierra tres días y tres noches."

Pero Mateo sí concuerda con Lucas en que también hace referencia acerca de tender una mano al pueblo en la periferia, lo cual es el punto principal en Lucas, en este caso incluyendo a los paganos en el plan de Dios, lo cual es representado con la conversión de Nínive en la predicación de Jonás y en la visita de la reina del sur para escuchar la sabiduría de Salomón.

Así que tanto para Mateo como para Lucas la respuesta a la “señal” que solicitaban los adversarios de Jesús se encontraba en la proclamación de las Buenas Nuevas a aquellos que menos lo esperaban — y su respuesta positiva.

... Necesitamos crear una cultura de encuentro para servir como un antídoto para nuestra cultura del desecho en la cual las personas que son percibidas como inútiles son marginadas: los bebés no nacidos, los ancianos, los inmigrantes, los pobres, etc.

¿Cuál es la señal de Jonás hoy? Pienso que es la transformación misionera de la Iglesia, la nueva evangelización convocada por nuestros últimos tres papas, en la cual somos llamados a salir a la periferia y llevar las buenas nuevas a aquellos cuya conversión puede ser tan inesperada como la del pueblo de Nínive en el tiempo de Jonás.

Y para hacer esto el Papa Francisco insiste repetidamente en "Evangelii Gaudium" que necesitamos crear una cultura de encuentro para servir como un antídoto para nuestra cultura del desecho en la cual las personas que son percibidas como inútiles son marginadas: los bebés no nacidos, los ancianos, los inmigrantes, los pobres, etc.

En esto, nuestra Iglesia debe ser una “señal de Jonás” contracultural para el pueblo de hoy. Si encontramos a Cristo en aquellas personas que usualmente son marginadas y tomamos el tiempo para conocerlas, no seremos capaces de desecharlas.

Tú no ignoras ni te olvidas de un amigo. Como sacerdotes, somos llamados a ser un alter Christus, otro Cristo, Cristo para los demás. Así que si Jesús iba a ser una señal de Jonás en su tiempo, nosotros somos llamados a ser una señal de Jonás vivo para nuestros tiempos.

Y es en Jesús, nuestro Salvador, donde podemos encontrar la valentía para dejar nuestra comodidad para poder encontrar a aquellos que viven al margen de la sociedad hoy.